Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.


Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso.
Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching

Capítulo XVIII - Gómez, Álvarez, G. Noblejas

jueves, 31 de enero de 2008

Cuando se pierde el Tao,
aparecen la moralidad y el deber.
Cuando la inteligencia y el conocimiento prosperan,
florecen los grandes hipócritas.

Cuando nace el desacuerdo entre parientes,
aparecen la piedad filial y el amor paterno.
Cuando la confusión se expande por el país,
aparecen los funcionarios leales.

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