¿Puedes, portando sobre ti el alma corpórea (ying po), abrazar el uno y no abandonarlo?
¿Puedes concentrar el soplo vital hasta alcanzar la flexibilidad,como un niño de pecho?
¿Puedes purificar tu visión profunda,libre de todo defecto?
¿Eres capaz de amar al pueblo y dar vida al Estado, sin usar el conocimiento?
¿Puedes abrir y cerrar las puertas del cielo, desempeñando el papel de hembra?
¿Puedes penetrar con clara visión todas las cosas, sin usar el conocimiento?
Produce y alimenta, produce sin apropiarse,
hace crecer y no gobierna, así es la virtud misteriosa.
Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Capítulo X - J. I. Preciado (texto Mawangdui)
domingo, 2 de enero de 2011
Publicadas por ani. a la/s 9:27 a. m.
Etiquetas: capítulo X, versión de J. I. Preciado
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