Ponemos veinte rayos juntos y a eso lo llamamos rueda;
pero es del espacio donde no hay nada
que depende la utilidad de la rueda.
Revolvemos arcilla para hacer un vaso;
pero es del espacio donde no hay nada
que depende la utilidad del vaso.
Perforamos puertas y ventanas para hacer una casa;
y es de estos espacios donde no hay nada
que depende la utilidad de la casa.
Por tanto, así como nos beneficiamos con lo que es,
hemos de reconocer la utilidad de lo que no es.
Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Capítulo XI
viernes, 17 de agosto de 2007
Publicadas por ani. a la/s 10:26 a. m.
Etiquetas: capítulo XI, versión de Arthur Waley
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2 comentarios:
Hola.
Me ha gustado mucho tu blog.
Yo tengo uno donde pongo entradas de varios temas relacionados con las filosofias y religiones orientales.
http://elarbolbodhi.blogspot.com
Un abrazo.
Hola Albert! te agradezco la visita, espero que vuuelvas cuando quieras, hasta pronto.
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