Lo pesado está en la raíz de lo liviano.
La calma es dueña de la agitación.
Así, el noble viaja el día entero
sin separarse de su imponente carga.
Y sólo cuando está rodeado de muros y atalayas,
se siente seguro y lleno de calma.
¿Cómo puede un rey con diez mil carros de combate
actuar con liviandad en el imperio?
Quien actúa con ligereza pierde la base.
Quien actúa con precipitación pierde el dominio.
Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Capítulo XXVI - Gómez, Álvarez, García Noblejas
viernes, 21 de agosto de 2009
Publicadas por ani. a la/s 1:02 p. m.
Etiquetas: capítulo XXVI, versión de Gómez/Álvarez/García Noblejas
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