Al abrazar al Uno con tu alma,
puedes mantenerte siempre en el Tao?
Al controlar tu fuerza vital para alcanzar la suavidad,
puedes parecerte a un recién nacido?
Al limpiar y purificar tu visión mística,
puedes ir en pos de la perfección?
Al amar a la gente y al gobernar el reino,
puedes dirigir sin interferir?
Al abrir y cerrar la Puerta del Cielo,
puedes encarnar lo Femenino?
Al comprender todo conocimiento,
puedes renunciar a la mente?
Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.
Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso. Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching
Capítulo X - Lin Yu Tang
lunes, 14 de enero de 2008
Publicadas por ani. a la/s 11:59 a. m.
Etiquetas: capítulo X, versión de Lin Yu Tang
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario