Algunas de las múltiples versiones de este texto.
Un espacio para la búsqueda de la sabiduría perenne; un lugar de reflexión para mí y todos quienes lleguen aquí como una posta en su camino personal.


Preguntó el príncipe: ¿Habrá en el futuro, quien pueda aprender y seguir los preceptos del Tao de vida que usted ha escrito en estos pergaminos de bambú?
Contestó el maestro: Por favor, amable príncipe, no te preocupes por eso.
Muchas, muchísimas generaciones después, si aún existen buscadores del Tao, hallarán estas enseñanzas.
Hua Hu Ching

Capítulo XX - R. Wilhelm

lunes, 19 de mayo de 2008

Entre “quizás” y “sin duda”,
¿qué diferencia hay?
Lo “bueno” y lo “malo”,
¿en qué se diferencian?
Hay que respetar lo que los hombres respetan.
¡Oh soledad! ¿Cuánto tiempo durarás?
Todos están tan radiantes,
que parece que hubiera llegado
la fiesta del Gran Sacrificio,
como si fuese primavera
y estuvieran subiendo a las torres.
Yo soy el único que duda,
aún no se me ha aparecido ninguna señal,
soy como un recién nacido que todavía no sabe reír,
desasosegado, errante, como si no tuviera patria.
Todo el mundo vive en la abundancia,
sólo yo parezco olvidado.
Tengo el corazón tan confuso y sombrío como el de un loco.
Los hombres de este mundo
son muy lúcidos, tan lúcidos.
Sólo yo parezco turbio.
Los hombres de este mundo
son inteligentes, tan inteligentes.
Sólo yo parezco encerrado en mí mismo,
agitado, ay, como el mar,
dando vueltas, ay, interminablemente.
Todo el mundo tiene propósitos,
sólo yo permanezco ocioso como un mendigo.
Soy distinto de los demás.
Para mí, lo más importante es
buscar el alimento en el seno de la Madre.

Comentario

Este capítulo se halla a menudo mal interpretado por quienes no ven la analogía entre las líneas 1 y 2 y traducen: Entre “por cierto” y “sin duda” (la afirmación decidida, masculina, y la femenina y vacilante) no existe una diferencia esencial. Mas ¡que grande es la diferencia entre lo bueno y lo malo!. Por lo demás, nuestra opinión está respaldada por el capítulo 2. De tomar la amarga ironía de las líneas 3 y 4 por una vana exhortación, no podríamos comprender también las siguientes quejas trágicas del individualista aislado en un mundo de hombres caracterizados por su inquebrantable alegría de existir. Los lamentos respecto a la soledad del que es “entre larvas el único corazón sensible” son extremadamente interesantes, desde el punto de vista de la historia de las religiones, como la otra cara de la medalla del individualismo religioso. Se trata aquí de un fenómeno típico que siempre va ligado al hecho de alcanzar un nivel superior del principio evolutivo. Es de especial interés, porque en China la psique social triunfó sobre la psique individual.

“¡Oh, soledad! ¿Cuánto tiempo durarás?” Seguimos en esto la tradición predominante. Otros proponen la interpretación: “El conocimiento del Sabio es ilimitado y carece de medida”

“Yo soy el único que duda, aún no se me ha aparecido ninguna señal”. La señal es el oráculo que se consultaba antes de toda empresa importante (en la antigüedad china se predecía por medio de caparazones de tortugas que se quemaban y en cuyas hendiduras se leía la respuesta), y que debía contestar antes de que se pudiera emprender algo. En este contexto habrá que darle un sentido más amplio (cf. los lamentos de Confucio ante el hecho de que no se le aparezca ninguna señal, en Conversaciones, Libro IX, 8).

“Agitado, ay, como el mar”. Seguimos aquí el texto de Wang Pi. La otra variante es: “Inquieto, como sumido en la oscuridad”

5 comentarios:

CANTACLARO dijo...

Ani, gracias por venir a mi casita.

No he dejado de visitar la tuya. El que esto empieza nunca lo termina. La retroalimentación se convierte en la vida misma del alma que busca.

En el cruce de los caminos se encuentran los que olfatean el aire de los tiempos, distiguiendo siempre el aroma que "ES".

Afectuoso saludo fraterno.

El Gaucho Santillán dijo...

Que bonito Ani!! vos sabès, algunas de la csas que escribo, empiezan leyendo poesìa oriental. que elegancia!
Te dejo un beso. Es un gusto leer tu blog

ani. dijo...

Cantaclaro, Gaucho: gracias por sus palabras, me hacen sentir la esencia de este trabajo mío.
saludos para ambos!

El Gaucho Santillán dijo...

Ademàs , agrego que TE CREO. (pero no te hago caso! jajajajajaja!!!)

ani. dijo...

ya le dije, gaucho, ud. decide ;)
saludos!